23/11/2007

La Voz de Galicia 23/11/207

Los hospitales mantienen todas las camas ocupadas y urgencias lentas
El CHUS hará una campaña para pedir a los familiares que recojan a quienes se van de alta antes del mediodía

Autor:
Joel Gómez
Fecha de publicación:
23/11/2007
El complejo hospitalario universitario de Santiago (CHUS) mantiene todas las camas ocupadas y la atención en urgencias continúa lenta por la elevada presencia de pacientes pendientes de ingresar. A las 15.00 horas de ayer había 60 personas en espera de una cama, una de ellas desde hacía cinco días por un problema traumatológico, según explicaba la médica del servicio y representante de la Xunta de Persoal, Fátima Nercellas. A las 18.00, el gerente, Jesús Caramés, admitía que eran 23 los enfermos pendientes de internar y consideraba que la situación era la normal para un día de noviembre.
Según el gerente, entre las 8.00 y las 18.00 horas entraron por la puerta de urgencias del Clínico 212 pacientes adultos, 49 pediátricos y 7 de obstetricia, una cifra que se sitúa en lo que suele ser habitual. El PAC empezó a sumar más a partir de las 15.00 horas.
Nercellas insiste en que hay que buscar soluciones para agilizar los ingresos, pues la acumulación de más de 20 enfermos en la zona de observación de urgencias -entre 30 y 35 se desvían para la sala de preingresos, que se mantiene abierta desde el domingo- dificulta asistir a quienes están pendientes de atención médica, e incluso se llegan a dar situaciones de ubicar a enfermos en lugares ilegales. Esta especialista considera que en Santiago debería abrirse una zona de pre-altas, como las existentes en otros hospitales, para agilizar que quienes están pendientes de cama puedan subir a una habitación; o que se abran espacios que están cerrados, como en el Gil Casares.
Jesús Caramés explica que desde el CHUS se hará una campaña para pedir a los familiares que recojan a quienes se les da el alta a poder ser antes del mediodía.
Sin embargo, considera que no es fácil: «polas características deste hospital, a maioría das persoas que se dan de alta van para a súa casa a partir das 14.00 ou as 15.00 horas. Iso é así porque máis da metade das altas costuman ser de persoas que residen relativamente lonxe, como en Muros, Noia, Lalín, Porto do Son, A Estrada, Carnota e outros lugares, e os familiares que os veñen recoller traballan, teñen ocupacións diversas e non poden vir antes. Por iso aquí se axilizan os ingresos a partir das 15.00 horas», explica.
Las habitaciones, una vez que se desocupan por quienes van de alta, tienen que ser limpiadas y preparadas para recibir nuevos enfermos, lo que demora un pequeño período.
No obstante, Caramés insiste en que «non hai motivos de alarma nen de preocupación especial» y confía que la campaña consiga resultados y se agilicen más las altas.
Respecto a la situación concreta de ayer, el gerente explicaba que la mayoría de las personas pendientes de cama para ingresar a media tarde sufrían problemas de traumatología y digestivos, y los menos complicaciones de cardiología, neurología o respiratorio.
De todas formas, se estaba lejos de alcanzar la situación de este lunes, cuando en el Clínico se asistieron 412 urgencias de adultos, 85 pediátricas y 16 de obstetricia, a las que sumaron 140 más en el Punto de Atención Continuada, lo que representó un total de 653, que suponen un auténtico récord de urgencias atendidas por la sanidad pública

Um comentário:

Anônimo disse...

Que non nos mareen con números.
Todos eses datos solo din que os pacientes quedan tirados nos pasillos, que non son atendidos ata moitas horas depois, ou que os meten en "habitacións de pasillo" como no xeral de vigo.
O de sempre e que ninguén dá resolto.